El automóvil del agente fue hallado en llamas en las afueras de Paso de los Libres, mientras él radicaba la denuncia. El arsenal sigue sin rastro.
Un policía de 29 años denunció el robo de su automóvil en Paso de los Libres, con un arsenal de 18 armas semiautomáticas en su interior. Según su testimonio, la sustracción ocurrió la noche anterior mientras visitaba a su hermano en el barrio Nuevo Amanecer, dejando el vehículo con las llaves puestas. Horas después, mientras formalizaba la denuncia en la Comisaría Primera, su Volkswagen Passat fue encontrado incendiado en un camino rural, sin rastro del armamento.
El uniformado, identificado como J. R. Roldán, aseguró que las armas, valuadas en unos 17 millones de pesos, le pertenecían y que solo tenía comprobantes digitales de su posesión. Entre el material denunciado había 16 pistolas calibre 9 mm y dos calibre .40, además de su chaleco antibalas y municiones. Según explicó, el día anterior tenía previsto realizar práctica de tiro, pero al postergar el plan dejó las armas en el auto y olvidó retirarlas al regresar a su domicilio.
El hallazgo del vehículo calcinado intensificó el misterio: los investigadores no encontraron rastro del arsenal y detectaron huellas de otro vehículo en la zona. La Justicia indaga el caso con hermetismo, ante la falta de respuestas claras sobre la procedencia de las armas y la extraña coincidencia entre la denuncia y el hallazgo del automóvil en llamas. Aunque Roldán figura como víctima, su versión ha despertado más preguntas que certezas.
