Desde la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad (FATSA) comunicaron el inicio de un plan de lucha que tendrá su punto de partida con asambleas informativas en todos los turnos y sectores desde éste lunes 20 de mayo extendiéndose hasta el día martes 21 en las mismas áreas.
El paro de actividades del sector de sanidad que se encuentra adherido a la federación se realiza el 22 de mayo con la modalidad de cese de actividades 2 horas por turno, el jueves 23 será de 3 horas por turno y el viernes 24 el paro será de 4 horas por turno.
Bajo el lema “Sin salario no hay salud”, FATSA reclama por 300.000 trabajadores que nuclea la actividad sanitaria que forman parte de los servicios esenciales, y exige respuestas concretas al tratarse de un equipo de salud altamente profesionalizado conformado por trabajadores con estudios terciarios y universitarios, sin ningún tipo de reconocimiento por parte de los empresarios dueños de Hospitales, Clínicas, Sanatorios, Servicios de Emergencias, Centros de Diagnóstico, Geriátricos, Psiquiátricos y Medicina Domiciliaria».
En el comunicado, la asociación recuerda que en los momentos más duros de la peor realidad sanitaria de los últimos tiempos en el
mundo, “Fuimos los Héroes de la Pandemia, reconocidos y aplaudidos por nuestro sacrificio y profesionalidad en la atención de cada enfermo”, tal es el texto que se extiende dentro del comunicado oficial.
Agregan que “Nuestros salarios han perdido dramáticamente su poder de compra y los empresarios del sector se niegan sistemáticamente a otorgar los aumentos que reclamamos desde hace meses”, destacan la cantidad de encuentros que se llevaron a cabo sin resoluciones definitivas y con salarios extremadamente bajos, licuados por la realidad inflacionaria: “Innumerables reuniones paritarias no han servido para conmover la intransigencia irresponsable de los representantes patronales. Los empresarios deben asumir su responsabilidad y pagar salarios acordes a la importancia de la tarea que desempeñamos. No vamos a tolerar salarios congelados y sin aumentos desde el mes de marzo. No podemos seguir trabajando sin mejorar nuestros ingresos, todo tiene un límite, hace tiempo que les advertimos que sin salarios no hay salud”.
Del mismo modo, en el comunicado dejaron claro que “Responsabilizamos a los empresarios de la Salud por los problemas que puedan ocasionarse en la atención de los pacientes”.


